Al final cayó. Tanto hablar la gente
tan bien de él, que al final me lo tuve que comprar. Éstos son mis primeros
“pasitos” con el Canon 50 mm 1.8 II.
Mi intención en este blog no es
analizar los aspectos técnicos del Canon 50 mm 1.8 II (para eso hay otras web
más especializadas o la misma web de la marca Canon).Mi intención es explicar, brevemente,
mis primeras fotos con este ligero objetivo..
Acostumbrado a mi Tamron 18-270 mm
F/3.5-6.3 Di II VC PZD, adaptarme a un objetivo de lente fija, os lo he de
decir, me costó un poco. Hasta ahora, no tenia la necesidad de ir acercándome
al sujeto: tiraba de zoom y ya está.
Con éste la cosa cambia. Ya no sólo en
tamaño, sino en peso, en una F que empieza en 1.8 y que da mucho más de sí.
He de confesar que una de mis primeras
fotos fue un desastre. Me acerqué mucho, no controlé la profundidad de campo y
el resultado fue este. A medida que iba disparando y viendo resultados, sé, más
o menos, cómo trabaja el 50 mm. No soy ni mucho menos un experto y gran
conocedor de objetivos, pero de lo que sí me dí cuenta de que es otro mundo.
Mi intención cuando lo compré era para
hacer macros de flores (ésta y ésta fueron de las primeras que hice), a mis tortugas..., y no tanto para hacer retratos, que es para lo que dicen que va
genial. Quise probarlo en distancias largas: paisajes y demás por si alguna vez
no me quiero llevar el Tamron y llevarme el Canon para no acarrear tanto peso.
El resultado no me ha decepcionado en absoluto. Mira estas montañas, esta
masía, este caballo y este caballo pastando de mi última salida.
En definitiva, y con mi modesta
opinión, creo que el Canon 50 mm 1.8 II es un objetivo muy versátil, que se le
ha puesto muy pronto la etiqueta de “objetivo para retratos” y que se puede, o
por lo menos yo lo hago, jugar mucho con él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario